miércoles, 24 de octubre de 2012

¡Viva el desequilibrio! 
En estos tiempos en los que el fútbol argentino atraviesa una etapa muy aburrida en la que abundan los 0 a 0, en la que la mayoría de los equipos prioriza el orden táctico por encima de la repentización, la fiesta futbolística que nos regalaron en Adolfo Gonzáles Chaves Independencia y Once Corazones rompió el molde y solo queda decir gracias por tanto espectáculo. 
Los entrenadores se mostraron preocupados al finalizar el partido por la forma en la que el rival les llegó y les convirtió, sin embargo para la vista del público y nosotros los analistas (o no), el partido fue sencillamente espectacular. Once Corazones puso a 5 atacantes: Casalla, Maciel San Román, Troncoso, Stornini y Morresi, y si bien Alberca recomendó a todos trabajar colectivamente en la recuperación de la pelota, el sistema defensivo falló. 
Independencia venía de hacer 6 goles, en su cancha había ganado 8 de los 9 partidos que había jugado y salió a ganar una vez más, incluso poco le importó estar perdiendo con apenas un minuto de partido y con Acosta, Duguine, Tavernini, Marcelo, Arteagabeytia y compañía arrolló durante media hora a Once, pero cada vez que Once lo atacó fue un calvario. 
Y así, con tantos jugadores ofensivos, el partido no puede defraudar, por eso ¡viva el desequilibrio!, aguante la vieja frase que dice: ”no hay mejor defensa que un gran ataque”. 
El domingo en Indio Rico volverán a verse las caras, después de la experiencia vivida con el 4 a 4 estampado, es claro que tanto Marcos López como Ariel Alberca tomen más recaudos, pero los que asistimos a la fiesta del último domingo quedamos más que agradecidos por el espectáculo brindado. (Fte: Línea de Juego)